Gestión de expectativas 

Hola,

Antes de nada decir que no tengo ningún tipo de estudio que avale mi conocimiento en nada de esto y que lo que traslado a continuación no son más que opiniones basadas púramente en mis propias vivencias, mi experiencia con el trato con personas y la pura observación. En fin que no se tome esto más que una pura reflexión personal sobre este tema.

Dicho esto, vamos allá.

Hoy me gustaría tratar la importancia clave que tiene la gestión de expectativas en nuestro quehacer diario, ya no sólo profesional, sino también en el personal; así como la relación directa que tiene con el sentimiento de frustración, fracaso y nuestro estado de ánimo.

Un ejemplo muy sencillo del día a día es cuántas veces nos hemos encontrado con días donde no teníamos previsto ningún plan y nos lo hemos pasado bomba, y otros días señalados del año como la nochevieja donde se espera que nos lo pasemos fenomenal ha sido una noche cualquiera.

Y todo tiene que ver con dónde nosotros mismos colocamos nuestro nivel de satisfacción mínimo. Qué bien nos sentimos cuando compramos algo que ha tenido una rebaja de precio (aunque es posible que el precio inicial a partir del cual negociamos nos lo hubieran doblado y el precio final haya sido aunque menor del inicial mucho más del precio real).

Vamos, que la clave de todo esto la tenemos nosotros; tanto para gestionar expectativas de otros como las propias y así conseguir no sólo reducir el nivel de frustración si no de una situación ciertamente complicada sacar lo mejor de todos.

Y es que en una gestión de riesgos típica de una gestión de proyectos clásica la gestión de expectativas es un plan de mitigación excelente; y como tal, en avance, ayuda a que se produzcan, o que se minimicen, problemas mayores.

Bueno vale muy bien me queda más o menos claro, pero cómo hago ahora yo para ayudar al grupo que gestiono en este sentido.

Pues lo primero que hay que hacer es conocer qué esperan el resto, sabiendo además que lo que puede esperar una persona del grupo puede distar enormemente de lo de que espera otra (cuando el objetivo a conseguir del proyecto es común a todos). Pongo aquí algún ejemplo como que es posible que algunos quieran enfrentarse a un reto técnico, otros que el proyecto les sirva para realizar labores de otro nivel de responsabilidad que les haga crecer en el plan de carrera, otros contar con un nivel de flexibilidad específico para poder cubrir su vida personal, otros no enfrentarse a según qué situaciones porque han tenido malas experiencias previas… En fin una marabunta de situaciones.

Lo segundo es en todo momento ser muy claro y dar toda la información; qué se puede conseguir y qué no en el escenario actual. Tras ello, conocer el feedback individual de cada persona del grupo al respecto de dicho escenario; a partir de ello dar los pasos adelante que permitan la consecución del proyecto sin dejar de lado las expectativas del grupo e intentando al mismo tiempo que la visión de la realidad desde todos los puntos de vista (uno por persona) sea lo más similar posible (conplicadísimo). Finalmente, y de manera periódica repetir el ejercicio: transparencia total sobre la situación, conocer feedback individual y trazar plan considerando todos los puntos de vista.

El nivel de relación con las personas que forman parte del grupo es clave ya que si el feedback no es sincero o es incompleto mal asunto; puedes tener a alguien delante que se está autodestruyendo y no verlo. En estas situaciones donde por tu nivel de relación crees que puedes tener un problema en este sentido, hay que tirar de capas intermedias, donde el nivel de relación es mayor (que no garantiza que sea mejor pero que aumenta su probabilidad). En fin que el objetivo es conocer la visión real de todos y meterla en la coctelera de información global y que se toma de referencia para la toma de decisiones.

Y claro, saber que si nosotros mismos no somos capaces de gobernar nuestras propias expectativas y emociones poco podremos ayudar al resto en este sentido, así que antes de dar otros pasos hacia adelante debemos empezar por conocer qué esperamos, a qué velocidad (muy importante el matiz de la velocidad, todos esperamos cosas pero tenemos una tolerancia diferente a los tiempos de espera) y hasta qué punto el escenario que manejamos nos puede ayudar a cumplir nuestras metas personales.

En fin, que mucha suerte a todos porque esto se cuenta fácil pero no hay nada más difícil que la gestión de personas; cada persona, una visión distinta de la realidad así qué ánimo y a desarrollar vuestra empatía cada día un poco más.

Un saludo.

Miguel.

Leave a Reply

Your email address will not be published.

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.